Los viajes en familia pueden ser experiencias enriquecedoras para estrechar el vínculo familiar y crear recuerdos juntos. Pero cuando pensamos en viajar con nuestro bebé, tenemos que tener algunos aspectos clave en cuenta. Si estás pensando en realizar un viaje en familia con los más pequeños de la casa, sigue los consejos de carritosbaratos.com para que vuestra experiencia sea todo un éxito.
Es totalmente normal que en las primeras ocasiones surjan dudas. ¿Adónde ir? ¿Qué llevar? ¿Qué tipo de carrito escojo? Es más sencillo de lo que piensas. Solo hace falta un poco de organización y tiempo.
El destino
Hay familias que prefieren hacer turismo nacional los primeros meses de vida de su pequeño, pero otras que viajan internacionalmente y no tienen ningún tipo de problema. Sea donde sea, el destino perfecto para viajar con bebés es aquel en el que podamos asegurarnos de su seguridad y fácil acceso a la sanidad.
Los bebés se adaptan a todos los entornos y lugares. Sin embargo, es mejor elegir destinos en los que haya buena comunicación de los trasportes y podamos garantizar el paseo cómodo con el carrito.
La maleta
Seguramente quieras meter en el bolso media casa y media cocina. Sin embargo, ¿no crees que es mejor conseguir lo que te haga falta en los supermercados del lugar de destino? Eso sí, te recomiendo llevar contigo la mochila portabebés y un carrito adecuado al tipo de viaje, estos productos sí que son esenciales para asegurar la comodidad del bebé.
El equipaje del bebé es muy similar a la canastilla que preparaste para ir al hospital. En él deberás llevar lo necesario para la higiene, mudas de ropa y sus productos de alimentación si no toma leche materna. Te aconsejo también no olvidarte de las medicinas que normalmente utilices para el pequeño, por si durante el viaje tiene algún día malo. Si lo prefieres, puedes contratar un seguro médico para el viaje o llevar con vosotros la tarjeta sanitaria europea.
Por otro lado, dependiendo del tipo de viaje y alojamiento, puedes optar por llevarte la cuna de viaje o la bañera, sobre todo en los primeros meses. Aunque hay hoteles y apartamentos en los que por un coste adicional podrás conseguir una cuna.
¿Y la comida?
Piensa que si le das lactancia materna, es mucho más sencillo, pero si le das leche artificial tampoco tendrás problemas. En la mayoría de los restaurantes, bares y hoteles puedes calentar el biberón, al igual que con los potitos o purés.
Si es cierto, que si tu hijo o hija ya come sólido encontrarás más ventajas en los alojamientos tipo apartamentos, por la facilidad y comodidad para preparar su comida.
Viajar con bebés no es tan complicado como parece, solo deberás plantearte el viaje con más calma y tener claro que deberás atender y adaptar las salidas o visitas a las necesidades que tengan los más pequeños. Lánzate y disfruta viajando en familia, serán experiencias que tanto niños como adultos recordaréis toda la vida.